an-natīŷa. Varios meses de preparación del Most Acho, ideando gilipolleces varias para aumentar y perfeccionar la mitología tontuna del concurso mostachil, como las reglas en castellano antiguo, los carteles anunciadores,…; varios meses de dejarse bigote soportando estoicamente la befa, la mofa y el chascarrillo fácil de propios y extraños; varios meses de tragar pelos bigotiles al disfrutar de una buena comida (y al almorzar también, sí, Agus); varios meses de preparación mental para la gran noche, con su cena y sus copas de después; en fin, varios meses merecedores de una gran recompensa tuvieron el siguiente resultado:
- me quedé el último en el concurso: dejé crecer los pelillos del extremo del bigote para redondearlos hacia arriba a lo
conde-duque de Olivares, pero salió mal el invento y los pelajos quedaron a su aire; y - además, debido a una sustancia inventada por el Demonio, de nombre limoncello, mi aspecto y estado fueron lamentables durante toda la noche.
El mostacho vencedor, sin duda alguna y barriendo por un amplio margen en una apasionante votación eurovisiva, fue el mostacho de nuestro Otto von Bismarck redivivo, un mostacho prusiano, frondoso, original y elegante: el mostacho de «El Alemán», también conocido por estos lares como «El Interesante». El camarero, hombre poco dado a la originalidad a la hora de bigotearse, otorgó sus votos a Pacorro, Johnny y Láguenas; pero me temo que lo de Paco era perilla y no bigote.
Efectivamente, con toda seguridad, aquella noche fuimos el grupo de personas más lamentable que se atrevió a poner el pie en las calles de Murcia. Si no os lo creéis, podéis comprobarlo en el álbum de fotos que pongo a continuación.
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EL RESULTADO |
P.D.: El éxito de la canción Dentro de Espinete hay una persona ha sido apoteósico, pero ya va siendo hora de cambiar las canciones de la barra lateral:
- We used to vacation — Cold War Kids
4.30 de la madrugada. En la radio, Salas y el Monaguillo dan paso a publicidad. Una niña sabionda y sabihonda le habla a su padre en un anuncio. El mensaje que pretenden transmitir es que un trasvase es mejor que desalar, y eso es algo tan obvio que hasta un niño lo entiende. Eso sí, la niña, para explicar lo simple y obvio que es eso, da así como unos 96 pasos deductivos con reducciones al absurdo y todo. Termina, dos segundos de silencio y empieza esta canción: pelos de punta con la letra, se comprende que hayan usado la distorsión como instrumento. ¿El eslabón perdido entre la «música Pol» y la «música Johnny»? Puede ser… - Favorite things — Me First & The Gimme Gimmes
Finales de los 80. Mis padres salen a cenar. Mi hermana se apodera de la televisión, coge una cinta en Beta y—¡horror!— pone Sonrisas y lágrimas por nonagésima vez. Ahora ya no hay nada que hacer: me sé todas las canciones. Debo confesar que la música de una de ellas me gustaba mucho, y todavía me gusta, independientemente de su nivel de pastelosidad. Un centro comercial cuyo nombre empieza por El Corte y acaba en Inglés la ha incluido en sus últimos anuncios. Pongo una versión que no es como para tirar cohetes, pero al menos es original. En YouTube hay versiones mejores: intimistas, de jazz…
P.P.P.D.: Un favor os pido para el año 2008: si dentro de unos meses veis en alguna tienda el DVD de Soy leyenda, corred hacia donde esté y, a continuación, proceded a prenderle fuego. ¡Por Dios, impidamos que llegue a las generaciones venideras!